Toma romero y ponlo en un frasco, ¡te será muy útil y no solo en la cocina!
El romero es una de las plantas aromáticas más populares, fácil de cultivar en el jardín o en la terraza. Esta especia tiene excelentes propiedades y su intenso sabor hace que las recetas sean mucho más sabrosas y apetecibles. ¿Alguna vez has intentado poner ramitas de romero en un frasco? ¡Pruébalo, obtendrás un resultado increíble!
Romero: una planta milenaria muy preciosa
Los orígenes del romero son muy antiguos, el uso de esta planta se ha extendido en épocas lejanas sobre todo en Asia, África y Europa. El romero tiene excelentes propiedades terapéuticas y los antiguos egipcios lo utilizaban como hierba mágica, creyendo que incluso podía dar inmortalidad. El romero también aparece en la antigua Roma, de hecho, los romanos solían quemar las ramitas durante los sacrificios a los dioses para purificar el aire.
Incluso hoy en día, el romero es una planta aromática preciosa de la que no podemos prescindir. Gracias al romero es posible potenciar los sabores y aromas de todas tus recetas. Por lo general, la planta de romero soporta tanto las altas temperaturas de la temporada de verano como el duro frío del invierno. Si quieres cultivar romero en el jardín o en la terraza, te recomendamos elegir un lugar bastante soleado y proteger la planta con un paño durante el invierno.
¡Intenta poner ramitas de romero en un frasco!
Como ya hemos dicho, el romero nunca puede faltar en la cocina, es un ingrediente precioso, imprescindible para muchas recetas. ¿Sabías que puedes hacer sal con sabor a romero? Para prepararlo tienes que seguir un proceso rápido y sencillo, puedes hacerlo con tus propias manos en poco tiempo. Consigue un poco de romero ylava cuidadosamente las ramitas con agua corriente. Pon las hojas de romero y unos 500 gramos de sal en una batidora. Enciende la batidora y reduce toda la mezcla en partes muy pequeñas y bien picadas. En este punto, coloque la mezcla en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino y hornee durante unos 30 minutos a 50 grados.
Una vez que haya pasado el tiempo necesario, saca la sartén del horno, deja que la mezcla se enfríe bien y colócala dentro de un frasco de vidrio. ¡Tu sal saborizada estará lista en poco tiempo! Puedes usarlo para sazonar y dar sabor a todas tus recetas. Por ejemplo, puede agregarlo a platos de carne, platos de pescado, ensaladas y muchas otras especialidades sabrosas.
Además de favorecer el paladar con su intenso sabor, también podrás aprovechar todas sus propiedades beneficiosas para el organismo.