Persianas: ¡el secreto para limpiarlas inmediatamente y con solo 1 ingrediente!
Hay tareas domésticas que son más fáciles que otras. Pero también están los que no soportas y que pospones siempre que puedes. La limpieza de persianas enrollables es una de ellas. Requiere tiempo y esfuerzo, así que tal vez sea hora de aprender algunos trucos para acelerar la tarea.

Persianas: ¡el secreto para limpiarlas inmediatamente y con solo 1 ingrediente!
No es lo mismo limpiar la persiana desde el exterior que desde el interior, sobre todo si no tenemos acceso a la persiana desde el exterior. También hay que tener en cuenta el material del que está hecha la persiana: madera, PVC, plástico, aluminio… Cada material requiere un tipo diferente de enfoque y producto.
Y por supuesto, el color también cuenta, porque el blanco, por ejemplo, es uno de los más difíciles de limpiar.
Digamos que independientemente del material, con un poco de jabón suave y agua limpia siempre podemos pulir nuestras persianas enrollables dignamente. Sin embargo, hay casos en los que la suciedad es especialmente resistente y obstinada. En estos casos, es necesario utilizar productos específicos (pero no abrasivos) y utilizar un limpiador a vapor.
Vinagre
Pero según la opinión de los expertos, solo un paño (preferiblemente microfibra) y un poco de vinagre pueden estar bien. Este último puede tener una eficacia desinfectante bastante buena. Basta con pasarlo por encima del paño y frotarlo sobre la superficie de la persiana durante unos segundos, tanto por dentro como por fuera.
El vinagre también es muy útil en el cristal de la mampara de ducha, otra de esas zonas del baño que muchas veces no sabemos cómo limpiar y que sobre todo nunca salen como nos gustaría.
Si no tenemos acceso al exterior de las persianas, la solución más habitual es abrir el cajón superior donde se enrolla la cortina.
Cogemos una escalera y con un cubo lleno de agua y jabón limpiamos la parte visible de la persiana enrollable. Luego desenrollamos un poco la cortina hasta que ya no veamos la parte que hemos limpiado y retiramos la suciedad que encontremos después. Repetir hasta que hayamos limpiado completamente la tienda.