Descubre por qué la yema del huevo se vuelve verde una vez que está hervida

El huevo es uno de los alimentos más completos que existen y siempre está presente en nuestra dieta mediterránea. El huevo es apto para numerosos platos, tanto fríos como calientes. A menudo, cuando preparamos un huevo duro, notamos un color inusual en la yema. ¿Alguna vez has visto que la yema de tu huevo duro se vuelve verde? Descubre por qué se convierte en este color.

¿Por qué la yema de huevo duro se vuelve verde?

Las principales propiedades de los huevos

Los huevos ofrecen muchos beneficios a nuestro organismo. De hecho, es un alimento muy nutritivo y muy apreciado. El huevo se caracteriza por tres elementos fundamentales que son, la parte exterior de la cáscara, la parte transparente de la clara de huevo y el corazón amarillo de la yema. Por lo general, la parte de la clara de huevo contiene numerosas proteínas y vitaminas del grupo B, además, es rica en sales minerales como el sodio y el potasio. La yema, por otro lado, contiene grasas y sales minerales, como hierro, fósforo y más.

Los huevos, como ya hemos mencionado, son muy nutritivos y representan un alimento completo. Son de fácil digestión y contienen antioxidantes, por lo tanto, ralentizan la degeneración macular. Los huevos también favorecen el funcionamiento del sistema nervioso y del cerebro, por lo que son aptos para todo el mundo. Por supuesto, hay personas como los veganos que eligen no comer uvas, u otras personas alérgicas que no pueden comerlas. En general, los huevos se pueden preparar de muchas maneras diferentes, por ejemplo, son buenos revueltos, duros, pasados por agua, fritos, etc.

Te recomendamos que compres siempre huevos ecológicos de gallinas camperas que garanticen una calidad superior y la máxima seguridad. Puedes guardar los huevos en la nevera y consumirlos para hacer deliciosos platos. Obviamente, trata de comerlos con moderación limitándolos a dos o tres veces por semana.

Cuando ves la yema del huevo duro verde se debe a una reacción química. Este fenómeno se produce debido a una reacción entre el hierro de la yema y el sulfuro de hidrógeno contenido en la clara de huevo. Por lo general, esta reacción ocurre durante la cocción a altas temperaturas. Obviamente, si la yema se pone verde es igualmente comestible y no daña tu salud. En cualquier caso, puedes evitar que adquiera este color intentando cocinar los huevos a temperaturas moderadas y a fuego lento. Te recomendamos que cocines los huevos duros durante 8-9 minutos y los pongas en agua fría inmediatamente después.

Así que, si quieres conservar el aspecto de tus huevos duros, sin correr el riesgo de que la yema del interior se ponga verde, sigue estos pequeños consejos.